Pues sí amigos, la legendaria Azucena, nuestra desmelenada diosa de negros cabellos e intimidante mirada, rompió su alianza con Jero y Miguel Ángel Collado y abandonó Santa, uno de esos nombres cuya sola mención debería bastar para que todos nos pusiéramos en pie y saludáramos con veneración y respeto.
Reclutaron a otra belleza morena, de nacionalidad argentina, llamada Leonor Marchesi, y sin perder el tiempo se pusieron a grabar su tercer trabajo, “Templario”, donde Leonor canta de maravilla con ese derroche de actitud, y cuya presentación en sociedad fueran esos versos que inician esta auténtica delicia “Ven Hasta Mí”, que vamos a escuchar.
De Santa conservaremos y valoraremos siempre sus tres trabajos como si fueran auténticos tesoros inolvidables.
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